fomentar el buen trato a todos los animales, atendiendo de cualquier forma legal a su PROTECCIÓN Y DEFENSA!, sin recursos económicos, pero con la ilusión y voluntad de sus fundadores, ADDA estableció su primera sede social en la ciudad de Mataró, posteriormente trasladada a la ciudad de Barcelona, con oficina en Madrid y posteriormente extendida a otras ciudades españolas.
Quiere denunciar y luchar en contra de cualquier abuso o explotación irracional o acciones degradantes causadas por la sociedad, colectivos o personas.